Todo el mundo sabe que la ley electoral y otros chanchullos parecidos que imperaron(e imperan) en el Reino Borbónico, se hicieron para excluir al PCE, allá por finales del último cuarto del siglo pasado. Carrillo y otros espabilados ya lo han reconocido públicamente.
Todo el mundo sabía(o al menos lo aparentan ahora) que esta ley electoral promueve el bipartidismo burgués.
Entonces, ¿porque tanta sorpresa por los resultados electorales por parte de los grandes perdedores?, ¿porque tanta sorpresa por el bipartidismo?.
¿Qué hay que cambiar la ley electoral?. ¡Pues anda que no hay que cambiar cosas antes!.
No me quiero repetir, pero yo cada día tengo más claro que la única solución sería disolver ese proyecto imperialista creado por la clase dominante ibérica, conocido como España, y ajustar la realidad social de los pueblos de la península a un nuevo marco de convivencia social. Y cuanto antes se haga, mucho mejor para todos. El proyecto regionalista es un invento que poco o nada tiene que ver con esa realidad.
Yo me decanté por la abstención activa. Mi voto abstencionista fue realizado mirando más al norte que al resto de la península. Era consciente que la abstención activa en el resto del Estado iba a ser insignificante. Aunque la esperanza de que me equivocara siempre ha estado.
Y de los resultados obtenidos en Nafarroa y Esukadi, hay una cosa clara: España tiene un gran problema. Y ese problema se llama Izquierda Abertzale.
Haciendo los cálculos precisos de los resultados electorales, se saca en claro que en Ego Euskal Herria hubo una abstención de 733.598 personas(206.808 más que en 2004), de los cuales 185.000 (como mínimo) corresponderían a la izquierda abertzale. Es un dato que la prensa nacionalista española se ha cuidado muy mucho en no dar a conocer. Podría dejar aquí mi opinión al respecto pero mejor os dejo que leáis este artículo de Ramón Sola publicado en Gara. Es el mejor análisis que he encontrado, con cifras y todo:
-Triunfo del PSOE y fracaso del PNV en unas elecciones marcadas por el aldabonazo del independentismo. (Ramón Sola en "Gara")
Ahora al PSOE solo le quedan tres opciones: Negociar con la Izquierda Abertzale, meterlos a todos a la cárcel, o matarlos. Aunque visto lo visto, nada es descartable. Pero el PSOE sabe muy bien que esos 185.000 ciudadan@s constituyen el núcleo duro de la organización independentista. Y han demostrado durante más de 25 años ser terriblemente tozudos.
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